miércoles, 6 de mayo de 2009

¿Cómo puede uno saber que es feliz y cómo serlo?

Todo en nuestros días apuntan hacia un mismo lugar: LA FELICIDAD.
Pasar un rato con los amigos debe hacernos felices, lo mismo que tener un coche o usar unos lentes, abrir una cuenta de banco o comprar una licuadora, salir de vacaciones con la familia, tener una familia (eso si, después de los 35 años para gozar la felicidad de la juventud), tomar yoghurt bajo en calorías (porque paradójicamente, la comida desnaturalizada ofrece sentimientos de ligereza y plenitud).
Frente a este panorama los infelices, los conflictuados, los deprimidos, los inconformes, los aburridos y los frustrados quedan excluidos y, peor aún, la inmediatez se impone como principio vital.
Todo debe presentarse con certificados de garantía y la noción de proyecto (con las dificultades que ello implica) se escapa de las coordenadas de vida. La felicidad se presenta como una obligación y, aparentemente, casi cualquier cosa debería conducirnos a ella.
¿Pero qué significa ser felices?
¿Porqué y desde dónde se impone este principio moral?
¿Cómo puede uno saber que es feliz y como serlo?

Desgraciadamente todavia no encuentro la respuesta